Un día de sol no siginifica que la primavera ha llegado…
Madre mía, es cierto… Nos lo pasamos tan bien en la Posada de las Manuelas (Horcajo de las Torres), fue difícil irnos, pero teníamos que continuar. Y Dios mío, vaya despertar que tuvimos. Ayer fue uno de esos días que no quieres que se repita (aparte de Maca al final del día). Nos despertamos con aullidos de viento y fuertes lluvias, las dos cosas que a un corredor descalzo no le gustan o no necesita, y generalmente no hablamos de las próximas condiciones meteorológicas, solo nos enfrentamos a lo que nos venga.
La ruta de Julia iba de Paradinas de San Juan, pasaba por Peñaranda de Bracamonte, donde Sonsoles, una periodista de la Gaceta de Salamanca, quería hacer una entrevista con Julia y terminaba en el medio de ninguna parte: Mencera de Arriba. (España rural llevada a su límite absoluto). Era claro desde el principio que iba a ser un día difícil. Como estábamos cambiando de hotel, íbamos en los dos vehículos, Julia tuvo que detenerse un par de veces en los primeros 10 kms para calentarse un poco y las condiciones eran brutales. Jack entró en Peñaranda de Bracamonte para buscar la ruta más corta a la plaza, y yo esperé a Julia a las afueras de la ciudad, así podría ayudarla a atravesar la ciudad.
Debí haber tenido un sexto sentido o haber leído su lenguaje corporal. Pude sentir que algo no iba bien, así que caminé hacia ella (llovía a cántaros). Julia se había enfriado mucho y estaba muy húmeda; su cuerpo estaba luchando para lidiar con todo, estaba desorientada y yo tenía la tarea de sacarla de la carretera! Buscábamos la plaza, Jack estaba en algún lado y la periodista quería saber dónde estábamos. Julia comenzó a hacer un video de Facebook en directo. Me preguntaba si estaba en un sueño del que no podía despertar. Sin embargo, después de un poco de tiempo, logré llevar a Julia totalmente confundida a una cafetería. Encontré a Jack en la calle cerca de la cafetería y Sonsoles nos encontró allí. El dueño del bar le había dado una toalla a Julia (creo que se llamaba Los Álamos), y después de un rato se recuperó! Hizo su entrevista, como una verdadera profesional. Sonsoles era encantadora y el artículo que escribió también era encantador. Julia se cambió de ropa, se calentó un poco y volvió a salir. Después de que volvimos a poner a Julia en el camino correcto, fui a la tienda de deportes y le compré ropa nueva más abrigada y una chaqueta impermeable muy bonita. Gasté una fortuna, lo siento Julia, ¡pero lo necesitabas!
Para el resto de esta semana se pronostica lluvia y nieve…, así que aún no ha terminado. Y nuestra aventura no había acabado tampoco. Mientras iba en el coche hacia nuestro hotel (Torredelmayorazgo), en Villatoro cerca de Ávila, rápidamente me di cuenta de que había nevado mucho, y no me gusta conducir por la nieve, pero hice un buen surco y pude cruzar, pero me pareció los 10kms más largos de mi vida. El hotel en el que nos quedamos durante un par de noches era genial, la comida fue fabulosa, encantadora y cálida. Y lo mejor fue un cachorro border collie llamada Maca, que era el cachorro del cocinero (Lalo), que entró como un terremoto, saltó sobre nosotros, y sacarle una foto fue difícil, no se quedaba quieta! Y todo va bien, si termina bien; fue la resistencia llevada al límite. Así que tienes una foto de nuestro anfitrión en Horcajo de las Torres, Isabel y Julio, quienes corrieron con Julia el domingo y nos prepararon una paella para el lunes del agua, fiesta